lunes, 10 de septiembre de 2007

Las relaciones hoy


Tratar el tópico de las relaciones entre hombres y mujeres de hoy, es casi que una odisea para mi dada mi falta de experiencia, pero, como me siento con ánimo, voy a desahogar un poco mis ideas al respecto, que bien pueden ser válidas o no.

Acabo de despertar de una especie de hipnosis que me tuvo apartada del mundo real, el tiempo suficiente como para sentirme sumamente pérdida en cuanto a establecer relaciones se refiere. Hay tanta variedad de "tipos" de relaciones, que tengo la cabeza embotada con tanta información. Creo que esta parte de la vida se ha convertido en una jungla...

Por un lado tenemos el común denominador: Todos queremos a alguien que nos ame, valore, respete, defienda, consienta, que sea fiel, bueno en el sexo, atractivo, y (aunque tratamos de huir de este concepto), una relación estable que conlleve a "legalizar" la unión de pareja o Matrimonio. En otras palabras, alguien que nos acompañe cuando estemos viejitos mascando el agua, y que nos ayude a cumplir con el sagrado deber de "crecer y multiplicarnos".

Y aquí es donde viene lo bueno. Como la vida no es lo suficientemente complicada, nos la enrollamos más y caemos en un desorden de hormonas e instintos incontrolables, acompañados de un deseo de rebeldía y autodestrucción, llevándonos a las más variadas situaciones, que convertidas en experiencias, nos "ayudan" a crecer, recibiendo u ocasionando heridas que tardan siglos en desaparecer, destruyendo y permitiendo que nos destruyan. Es decir, ahora VIVIMOS EL MOMENTO...

No hay responsabilidades, no hay compromisos, y nos anotamos una historia más que contar, estamos simplemente "viviendo". Seleccionamos pareja, como si se tratara de una muda de ropa, algo a si como que hoy la uso, mañana no sé. Y en este grupo entran los encuentros casuales, las citas a ciegas, los inesperados, las coincidencias o causalidades y por supuesto, los amigos con derecho.

Es tal, el deterioro del autoestima en general, que hombres y mujeres por igual aceptan compartir con alguien a ratos, sin impórtales en lo más mínimo que esa persona tenga o no pareja. ¿Que es lo bueno de este tipo de relación? Sexo seguro o más bien sexo fijo. Lo malo, es que uno de los dos saldrá de esta situación con las tablas en la cabeza, cualquiera independientemente del rol que cumpla en la relación, terminará involucrándose más de lo debido.

Del otro lado están los eternos novios, que sufren los estragos de los arriesgados en el plano anteriormente señalado. Insisto en que el problema es de autoestima, por un lado los hombres parecen sentirse menos hombres si rechazan a una mujer, si no tienen una mujer o si no pueden contar historias fantásticas a sus amigos. Y por el otro, las mujeres que necesitan creer que son aceptadas por los hombres o “populares”.

A ninguno de los bandos les importa el precio, siempre y cuando obtengan lo que quieren: Sexo, una relación sin Compromisos, ni Responsabilidades… y más allá de todo, la sensación de creer que pueden controlar sus sentimientos y enamorarse “inteligentemente”, a fin de evitar futuros daños. Como si por fuera no se pudiera ver que están en ruinas y más necesitados de amar y ser amados que el resto.